«Comprar una casa acá es imposible». (Omar Abdelahdi Faraj, uno de los ex reclusos de Guantánamo acogidos por Uruguay citado en un artículo de la agencia AP publicada por el diario británico «The Guardian», lunes 2)
«Por gente que en vez de pensar en los refugiados piensa en marketing o en lo personal, ya no va a haber más grupos de refugiados en Uruguay y esas 140 familias que estaban esperando para ir a Uruguay dentro de un mes se mueren, algo que quizás no les pasaba si iban a Uruguay». (Corresponsal de guerra español Julio Alonso, quien cuestionó la actitud de integrantes del gobierno al recibir a los refugiados sirios y los ex presos de Guantánamo, «Montevideo Portal», miércoles 18)
«Nosotros sentimos que salimos de una prisión y entramos en otra». (Ex preso de Guantánamo Abu Wael Dhiab sobre su situación en Uruguay, «Telemundo» de Canal 12, martes 17)
El gobierno dejó «sin contención» a los ex detenidos de Guantánamo y se convirtió en el «cómplice de una prolongación de la cárcel»
El Poder Ejecutivo tramita los pasaportes de los ex reclusos de Guantánamo para que, si quieren, se puedan ir a otro país
«Miren la importancia que le damos a una familia siria, y no sale todos los días en las tapas de los diarios la gravedad que tiene (la violencia doméstica) en Uruguay. Entiendo la importancia que le damos porque son los sirios que trajimos y es una situación muy especial, pero hay miles de casos anuales que no tienen esta trascendencia». (Prosecretario de la República, Diego Cánepa, tras declarar ante la jueza Dolores Suárez por denuncias de violencia doméstica entre las familias de refugiados sirios en Uruguay, «El País», martes 10)
